Mientras el iPhone y Android van comiéndose a pasos agigantados el mercado de los smartphones, en Nokia, después de las dimisiones masivas de los últimos meses, del fracaso del Nokia N8 e incluso de perder cuota de mercado en su mercado bastión, India, las cosas empiezan a ponerse un poco peliagudas. Parece que los finlandeses han acabado por darse cuenta, y mira que les ha costado, que la solución pasa por renovarse o morir y la perspectiva de usar un sistema operativo de terceros ya no suena tan mal después de todo. Y es que desde hace unos días los rumores de una posible alianza con Microsoft han levantado las acciones de la compañía casi un 5%, que se dice pronto.
Todavía no está todo dicho aunque cuando el río suena agua lleva, eso está claro, pero la legendaria testarudez de Nokia me parece que tiene demasiado peso como para darlo todo por hecho tan fácilmente. A la hora de incluir un sistema operativo que no sea el infame Symbian^3 en sus smartphones los finlandeses tienen dos posibilidades, Android, que visto lo visto parece muy poco probable y Windows Phone 7, que si hacemos caso a estos últimos rumores y a algunos movimientos que hemos podido ver los último meses me parece que lleva todas las de ganar. Como bien indican en Celularis, la sombra del próximo Mobile World Congress es alargada y la compañía necesita dar algún gran anuncio a los inversores y analistas.
El próximo 11 de Febrero en Londres en su Strategy and Financial Briefing la compañía dará a conocer cuál será su estrategia para 2011, si lo que realmente quieren es recuperar la confianza perdida tanto de inversores como de prensa está claro que ese podría ser un buen momento para ello. Por otro lado, y analizando la alianza desde un punto de vista meramente técnico y estratégico, en mi opinión podría ser un movimiento fabuloso. Si nos fijamos un poco por un lado vemos a Windows Phone 7, un sistema operativo que ha resultado ser bastante bueno pero que aún está en pañales y necesita de alguien que le de un buen empujón y por otro a Nokia, que hace unos teléfonos con un hardware exquisito y sencillamente espectacular pero que acaban por ser prácticamente inusables porque la compañía sigue empeñada en venderlos con Symbian.
Por eso, de la alianza entre ambas compañías nacería una línea de teléfonos que heredaría lo mejor de ambas, por un lado el sólido sistema operativo que es Windows Phone 7 y por otro el fantástico hardware (recordemos la cámara de 12 Mpx del Nokia N8, o la salida HDMI) de Nokia, el resultado, aunque aún es pronto para decirlo, podría ser algo muy apetitoso. Dicho todo esto y por desgracia, lo único que queda por hacer es cortarle alas a la imaginación y esperar a ver si todos estos movimientos y rumores llevan a algún lado o es sólo otro paso en falso más de los finlandeses ¿Vosotros qué opináis? ¿Creeis que puede salir algo bueno del matrimonio entre Mr. Microsoft y Ms Nokia? El tiempo lo dirá.